Hablando en términos biológicos, los virus y las bacterias son organismos microscópicos que habitan dentro de los cuerpos. Se diferencian en función del tamaño y en función del método de reproducción… Las bacterias son organismos vivos que tienen una sola célula, y que para reproducirse utilizan, al igual que otras células, su código de ADN y ARN.
Los virus, son partículas, de una sola célula, pero que no se les puede considerar como seres vivos, y que no pueden reproducirse por sí mismos, necesitan de otra célula a la que inocular su propio ADN para que sea esta célula nueva, ya infectada, quien reproduzca el virus.
Las bacterias por tanto se consideran unidades independientes que se reproducen solas y por o tanto disponen de facilidad para sobrevivir en todo tipo de ambientes.
El virus, pese a no estar vivo, puede permanecer latente durante miles de años en espera de encontrar un huésped válido para sembrar su semilla de ADN y poder reproducirse. El virus por lo general penetra dentro de una célula e impone su código genético.
La mayoría de las bacterias no solo son inocuas al ser humano, sino que incluso son beneficiosas ya que descomponen la materia orgánica y destruyen los parásitos dañinos. Los virus, a diferencia de las bacterias, son todos peligrosos y dañinos. Los antibióticos acaban con las bacterias pero los virus resisten con mayor facilidad. Muchos virus como el de la gripe, la única solución es esperar que pase. Aunque existen vacunas que son los propios virus debilitados, que permiten a la sangre crear anticuerpos, para así, de esta manera, cuando llega el virus fuerte, ser combatido.